viernes, 25 de febrero de 2011

10-B

Saludos querido lector! Si así como mi tutora, se pregunta… ¿qué carajos hace Lulú en su servicio? Le comparto algo de mi trabajo:


10-B, el espía de Plutarco Elías Calles.

Al puro estilo del 007 un mexicano muy peculiar logro filtrarse en la embajada norteamericana en México y suministrar informes delicados de fuentes estadounidenses al Gobierno.

Durante el siglo XX existieron varias agencias de inteligencia como: el Departamento de Inteligencia de Militar, el FBI y el Departamento del tesoro entre otros. Varias de las personas afiliadas a dichas dependencias eran altos funcionarios mexicanos con el fin de hacer uso del personal.

Dentro de estas organizaciones el trabajo consistía en informar a quien lo solicitara. Por un lado existieron los Cónsules mexicanos quienes respondían ante Gobierno mexicano y tenían la misión de vigilar a los exiliados a Estados Unidos con el fin de evitar sublevaciones y conspiraciones. Por otro lado existían los Cabilderos, quienes trabajaban de forma más particular con personajes como Carranza o Madero. Aunque la información que fluyó entre ellos generalmente fue limitada por la nacionalidad de los primeros ya que habitualmente eran americanos, lo que imposibilitaba una relación de confianza por el temor a la traición.

Nuestro personaje fue conocido como 10-B, su verdadera identidad no es conocida aun con mucha claridad. La mayor parte de su labor fue realizada durante las actividades entre México y Estados Unidos, su trabajo se mantuvo relacionado con la crisis existentes en las relaciones a partir de la administración del presidente Calles y sus reformas en la Constitución de 1917.

En dichas modificaciones exigía a las compañías petroleras extranjeras cambiar sus contratos de consecución por contratos de arrendamiento por 50 años y así mismo renunciar al derecho por apelación ante gobiernos extranjeros (P.4). El resultado del anterior movimiento fue el abierto desacuerdo del James Rockwell Sheffield, abogado corporativo y embajador estadounidense en México, quien demostraba abiertamente su desacuerdo no solo con las nuevas reformas sino con todo el gobierno mexicano.

Distintas declaraciones y documentos que confirmaban el odio y desacuerdo de parte de Sheffield fue demostrado por el agente 10B. Por lo que no tardaron en tratar de desacreditarlo diciendo que trabajó en un principio par el presidente Coolidge y desde la Segunda Guerra Mundial para EUA. Pero el departamento de Estado y el Departamento de Inteligencia Militar no lograron ser convencidos.

El informe final fue entregado a un periodista en New York, George Barr Beker, para que pudieran pasar a manos del presidente Coolidge y se diera cuenta del corresponsal que tenia en tierras mexicanas. Esta situación fue planeada con anticipación por Calles con el objetivo de hacer sustituir a Sheffield, por su mala efectividad en su administración y su tentativa de efectuar una intervención armada. Finalmente el objetivo fue logrado.



Fideicomiso Archivos Plutarco Elías Calles y Fernando Torreblanca, Friedrich Katz. Boletín, “El gran espía de México”, Volumen 20, México, Septiembre- Diciembre, 1995.

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